La diabetes es una enfermedad crónica que aumenta en todo el mundo, debido fundamentalmente al rápido aumento del sobrepeso, la obesidad y la falta de actividad física.
Mantener una buena salud bucodental te ayuda a evitar la aparición de problemas relacionados con diabetes, como la periodontitis, el exceso de acumulación de placa bacteriana o las úlceras orales persistentes. Es, por ello, muy importante que se cumplan con los cuidados diarios de la boca, especialmente las personas que padecen periodontitis, ya que tienen más riesgo de desarrollar diabetes mellitus tipo II.
-Entre otras cuestiones: extremar su higiene bucodental cepillándose los dientes, al menos, tres veces al día durante tres minutos cada vez, utilizar seda dental y colutorios de manera regular, consumir alimentos saludables como fruta, verduras de hojas verdes o leche.
-También, cómo no, evitar el tabaco y acudir al dentista de manera periódica, al menos dos veces al año.
Según recientes estudios promovidos por la Federación Dental Internacional y el Consejo General de Dentistas, existe una relación bidireccional entre la salud oral y la diabetes, siendo causa y efecto de esta patología, que afecta en la actualidad a 347 millones de ciudadanos.
Así se confirma que los pacientes que padecen periodontitis podrían tener diabetes de tipo 2 con mayor frecuencia que aquellos con las encías sanas. Del mismo modo, los enfermos diabéticos suelen desarrollar enfermedad gingival severa, que afecta el control de la glucosa en la sangre y contribuye a la progresión de la diabetes. La revisión de la salud de las encías de manera regular podría ayudar a detectar precozmente diabetes y también a mejorar el control de ésta en los que ya tienen una diabetes diagnosticada. La enfermedad de las encías progresa más rápido cuando la diabetes está mal controlada.