La salud oral debe iniciarse desde la más temprana edad, pues unos hábitos correctos influirán en un desarrollo máxilo-dental adecuado de tu bebé cuando vaya creciendo.

Por eso, siguiendo estos fáciles consejos, podremos cuidar de la salud bucal de nuestro bebé:

  1.   EVITAR EL CHUPETE. Aunque algunas veces resulte una herramienta eficaz para calmar al bebé, hay que retirarlo lo antes posible para que no cause mordida abierta y NUNCA se debe mojar en productos dulces como miel o leche condensada.
  2. NO DEJAR EL BIBERÓN EN LA BOCA DEL BEBÉ. Debemos evitar que el bebé se duerma con la tetina en la boca ya que esto iguala el efecto del chupete, además de poner en contacto a los azúcares del biberón con la dentición.
  3. EVITAR QUE SE CHUPE EL DEDO. Este gesto instintivo puede tener consecuencias graves en la correcta formación ósea, por lo que debemos corregir este hábito desde su aparición.
  4. LIMPIEZA DEL PRIMER DIENTE. Desde que erupcionan los primeros dientes, ya podemos comenzar su limpieza. Siempre que el bebé nos deje, usaremos una gasa (seca o impregnada en clorhexidina) para limpiar suavemente los dientes.
  5. AGUA DESPUÉS DE LAS MEDICINAS. Algunos medicamentos (antitérmicos, jarabes…) tienen un alto contenido en azúcares, por lo que dando agua al bebé después de su ingestión, favorecemos que la presencia de azúcares en la boca disminuya.
  6. AGUA DESPUÉS DEL VÓMITO. En edades tempranas es frecuente el vómito por diversos motivos. Cuando este se produzca, hay que evitar un cepillado fuerte que aumente el efecto erosivo de los ácidos gástricos. Al contrario, un suave aclarado con agua resulta más beneficioso.
  7. PRIMER AÑO DE VIDA:PRIMERA VISITA. La visita al dentista puede hacerse desde el primer año de vida para interceptar y corregir las posibles alteraciones que se observen.
  8. EVITAR ABUSAR DE LOS AZÚCARES. Enseñar una correcta dieta, sin exceso de azúcares, es aprender un hábito saludable para toda la vida.
  9. ENSEÑAR A MASTICAR ALIMENTOS DUROS. Cuanto antes empiece a masticar nuestro hijo, los dientes realizarán su propia función de autolimpieza gracias a la dureza de los alimentos.
  10. EL CEPILLADO DENTAL:UN JUEGO DE NIÑOS. El cepillado dental debe ser un hábito fundamental y, para ello, debemos promoverlo desde la edad más temprana. Tomarlo como un juego, estimularlo con cepillos y pastas, ayudarán al niño a ser protagonista de su salud oral.

Con estos 10 consejos, conseguiremos que nuestros hijos mejoren el estado de sus dientes y boca, y le ayudaremos a tener una mejor salud.

 

Leonor Osuna Moliz – Col. 14/00/1893